Existiriamos el mar

El libro "existiriamos el mar" es como una declamación con partes muy interesantes y dignas de mencionar. Se lo voy a dedicar en este día tan especial como es la festividad del Carmen, a Peter Brook y a Marisa Fanjul, apasionados del teatro y la danza y que nos han dejado recientemente.

La autora Belén Gopegui aporta mas sobre la condición de la mujer trabajadora. Son muy interesantes las cuestiones que plantea para todo el mundo pero especialmente para la mujer madre, maestra, trabajadora "el ser buena gente". La escritora nos dice en una entrevista que "a veces la obligación de ser buena gente ya vale mucho". Las relaciones con los hijos, alumnado, requieren formación y ser buenas personas y parece ser que ser madre, maestra implica esto además de trabajar y a la vez mantener la ilusión, la motivación, hacerlo bien, tener esa belleza, esa ternura con todos y más con las personas más vulnerables, permitir esa admiración por el saber, por la vida, "comprender la realidad, y a partir de ahi no empeorarla, contribuir a evitar el sufrimiento", que se pueden evitar muchos problemas, que ya sabemos la realidad pero que sino hay arroz por ejemplo hay zanahorias, que por eso tampoco se acaba el mundo, y si pusiste arroz a hervir comes arroz, y es que había arroz, y sino pues hay otras cosas, por ejemplo zanahorias y comes zanahorias. "Cuándo los tropiezos son leves, momentáneos, no se toca fondo, entonces no hay más preguntas, la causa de que hay arroz en el plato es que pusiste arroz a hervir. Si pusiste zanahorias hay zanahorias. No puede ser que pongas arroz y agua en el cazo y el resultado sea un plato de zanahorias, pero la vida humana es más complicada que todo esto, que un plato de zanahorias".

Añade la autora que entre creerse que el trabajo es nuestro o no lo es existen otras creencias que van mas allá como la motivación, la ilusión por hacerlo bien, saber, por formarse. Que no hay que hacer un mundo de todo pero que si hay algo que ya no se puede cambiar es lo que pasó, ya no se puede evitar, por eso la experiencia vivida tiene un valor incuestionable, y existe una relación causa-efecto, las circunstancias adversas tienen reacciones adversas, llevan a una forma de proceder, de actuar que tienen unos efectos, unas consecuencias, muchas veces pasan desapercibidas estas reacciones, son situaciones de la vida diaria, y son importantes, parecen difíciles de comprender. El pasado ha servido para mejorar y corregir errores porque se ha aprendido. Que hay en la vida muchos factores de confusión de los que hay que estar atento para poder hacer lo correcto y de no hacerlo rectificar y corregirlo y hay que llevar en la vida estas confusiones que a la vez distorsionan y por eso se hacen asociaciones, para que no vuelvan a suceder, porque surge un efecto donde en realidad no existe, se puede exagerar dando a una confusión positiva, o al revés invertir esto dando a una confusión negativa y entre una y otra hacer esa asociación que es real.

Los protagonistas vivian en un piso colectivo pero una de las compañeras se había ido y no quiso dejar huella, ni rastro, ni que se supiera más de ella, no quiso saber nada ni que lo supieran. Tienen todos alrededor de 40 años y se ve como la vida ha cambiado respecto a todo, especialmente de la familia. Cada personaje es un mundo.

Mas que una queja hay complicaciones, todo es como una descripción de ese cambio social, un discurso para dar la idea completa y poder explicarlo todo porque "las cosas suelen girar en torno a la necesidad de no perder, que no se parece a ganar, sino a mantenerse en esa zona dónde no hay victorias ni derrotas absolutas y dónde la tensión cansa. Eso no es lo que ella entiende por una promesa. La promesa de descubrir algo, de hacer avanzar la ciencia, de la lucha contra la enfermedad, la colmaría".

El sentido de las acciones, que luego parece que no se puede preguntar, que lo inteligente es el silencio y ahi quedan los sentimientos heridos, por no aceptar lo que no se conoce, esto se hace emocional, y es como oscuridad, luego como que hay que aceptar creencias, rituales sin más, sin ver la explicación cultural.

Aceptarlo todo sin preguntar, con silencio es emocional, como durante la pandemia que de ella nos dice que emocionalmente durante la misma se ha visto mas afectada "tampoco con la pandemía ha podido contribuir en nada, la obligaron a trabajar mas ni pudo participar ni entonces ni ahora. En la decisión de lo que van a investigar apenas tiene autonomía para opinar sobre cómo hacerlo, y no tiene, ninguna para elegir a quién beneficiará".

Son muy interesantes las preguntas que aparecen en el texto ¿Porque pasa lo que pasa?, ¿Cuántos factores de confusión se pueden soportar a la vez?, ¿y si sí? , ¿cómo se quita el miedo?, ¿quién eres? ¿Que te hizo sentir como eres?.

Nadie se libra de pensar. A veces unos miedos tontos se vuelven grandes. Y sobre los pensamientos se va planteando como hacer y cómo elegir una vida distinta pero siempre trabajando y dando sentido al trabajo y es verdad que los trabajos no son iguales, que unos son más profundos que otros como en el caso de la docencia, y que una vez en el trabajo lo vives y parece ser que lo material no cuenta, pero no es así, ni en el trabajo ni fuera de él se quiere precariedad. Y hay unas condiciones en que se realiza el trabajo que obliga a tener ciertos recursos materiales, y ciertas exigencias y aprender a hacer frente a la presión ya sea de los mandos, del alumnado, de las herramientas con las que se cuenta y del espacio y tiempo pero fuera de él también, hay tareas y gestiones cotidianas, y es aqui donde el libro te lleva a reconocerte tambien a ti misma y a ver que se quiere todo de una forma mas razonable, y que puedas volver a casa sin tener nada pendiente, en el sentido de hacer bien lo que se hace y no obsesionarse, porque añade que no aguantaría ni malos tratos ni que la culpabilizasen cuando no sale como quiere, o le cambian el horario, le aumenten sus funciones o le asignen otras que no son suyas, la vigilen constantemente, el estar sometido a ese engaño o derechos pendientes, o al cansancio, el cinismo, la mentira, los insultos.

Hay que cambiar muchas cosas para que cada trabajo tenga sentido y no todos los trabajos son igual de profundos y la parte material del mundo cuenta. No es colocar herramientas, informar, o atender en lo que lo causa. No es lo que hace son las condiciones en que lo hace. Sino fuera por las exigencias desmedidas, el sueldo escaso, la continua presión de los mandos, estaría bastante contento con su oficio, en el caso docente no son los mandos solamente sino las organizaciones y las personas que las conforman, alumnado, familias, compañeros. Siempre nos dicen que se recogen sus frutos pero es curioso lo que nos dice que seria algo parecido a recoger aceitunas y naranjas con salarios y horarios razonables, espacios razonables, no convertirlos en lugares de pesadillas y tener que pasar el tiempo al aire libre como el caso de las granjas y los pollos.

Es todo un poco lo que cada persona puede soportar. Siempre gusta volver a casa sin tener nada pendiente, y tratar de hacer bien lo que hace. Lo que no aguanta son culpabilidades, o que se realicen cambios de repente para beneficiar a otros, que le cambien de turno, le vigilen constantemente, le aumenten sus funciones o le pongan otras que no son suyas, que estiren su horario, su cansancio, que enfrenten a los compañeros, el engaño, los derechos pendientes o que para fastidiar digan que estan enfermos o que no pueden ir o no se presenten o les mientan, tampoco aguanta que lo de ser jefe sea arbitrario, que depende de como caigas o de que hayas hecho un bien, o de como estes ese día o de como te presionen.

Las presiones son un problema pero ahora hay instrumentos para que algunas no se produzcan y para frenar muchas de las que se reciben. Llega a decir que a los mandos les irrita la expresion, la comprension, el dialogo, la condición de ser muy trabajadora porque siendo así no se las puede culpabilizar, si se trabaja mucho y bien se hace más dificil. Y que en el trabajo hay esa lucha, todo tiene explicación, todo se puede explicar hasta las ideas preconcebidas.

Es cierto como dice la autora que no se quieren problemas, ni culpabilidades, ni que caigan las decisiones en uno, ni pedir permiso constantemente, ni controlar y vigilar todo, sino de ser responsables, pero parece ser que quienes tienen mas medios los emplean para ponerlo mas dificil, realizar más prohibiciones, más normas, y no lo hacen siempre más agradable, aqui hay algo que va más allá de lo moral, de lo ético.

El libro es todo así, me gustó mucho, muy bonito, es todo como la tesis lleno de dinámicas humanas donde se une lo posible y lo imposible, lo individual y lo colectivo, lo público y privado, la perseverancia y la libertad, la firmeza y la inseguridad, la energia, la fuerza, la lealtad y que lo mas apasionado surge sin mas y no tiene porque ser real, pero tampoco irreal sino pues comprenderlo y reirse de una misma, es fundamental esto, el respeto, el ser equipo, el compartir, el ponerse en lugar del otro.

Para finalizar lo hago con unas frases y comentar que el titulo me llamó mucho la atención "Existiriamos el mar", se entiende muy bien, el mar consuela esfuerzos, crea sensaciones, la posibilidad de vivir de otra forma, de aprender a convivir, a ser, la necesidad de estar juntos, de compartir salarios, de entender las formas de ser, las relaciones, de respetar, de ver que cada persona tiene su vida y hay que aprender ya sea en casa, en el trabajo a resolver conflictos, saber liberarse de los problemas, del estrés y continuar la vida, ser un poco más felices. Volvemos a las emociones, a reir, llorar, disfrutar, ser autónomos, divisar paisajes. Realmente todo el mundo quiere una buena vida, verse con esa ilusión, con privilegios.

"Puede uno sentir vergüenza de ser el único en ser feliz"

"Para preservar la propia alegría es necesario que el entorno tenga trazas de ser justo, de lo contrario, cuestión de tiempo"

"Tratarte como persona tiene que ver con las condiciones de trabajo"

"Los sentimientos no son solo impulsos sino tareas que luego hay que cultivar"

"Vivir es habitar el tiempo"

"La realidad es aquello que cuando dejas de creer en ella no desaparece, y no quieres ser aguafiestas que te lleve a una ilusión absurda"

"Imagina que el destino de este mundo no está ni en puentes ni en luchas sino en la capacidad de vivir otros mundos"

"La moral es una cuestión de calidad"

"El método para elegir es poner la vida en el centro"